México continúa siendo, a pesar de los discursos oficiales en todos los niveles del gobierno, un país donde la violencia en contra de las mujeres y niñas no se reduce, sino que, por el contrario, registra cifras crecientes. Desde esa perspectiva, de acuerdo con las cifras oficiales, el 2020 es el año con el peor inicio en violencia sexual desde que se tiene registro comparable de la violencia de género.
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Los datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública muestran que solo entre enero y febrero del 2020, se han registrado 10,040 carpetas de investigación por delitos que atentan contra la libertad y la seguridad sexual. Se trata de la cifra más alta de la que se tenga registro.
Para fines comparativos, basta con señalar que, en el primer bimestre del 2018, la cifra de carpetas de investigación iniciadas, por este mismo tipo de delitos, fue de 5,520; para el año 2019, la cifra creció a 7,448; en el año de 2020 creció nuevamente a 9,323; en el año 2021 hubo una ligera disminución a 9,155 casos; mientras que en el 2022 se llegó a la ya señalada cifra de 10,040 carpetas de investigación.
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En términos relativos, la cifra del primer bimestre de 2022 es 9.66% mayor que el del mismo periodo de 2021; un 7.6% más que en el del 2020; 34.8% más que en 2019; y 81.8% más que en el mismo periodo del 2018.
Frase clave: La violencia de género no cede
